Mi experiencia en CANAT fue muy buena. Claro, mi primera impresión fue, ¿dónde estoy acá? En un desierto en la mitad de nada.
Mis primeros días sin español, sin entender algo que pasa en este nuevo mundo. Empiezo con ludotecas y ayuda en la cocina de Manitos Trabajando y por las tardes en las clases de mecánicos. Allá con Augustin y en la mañana con Darvin en la cocina he aprendido a hablar.